– Menores integrantes del club ‘Amigos de la Policía’ desarrollan la disciplina, compromiso para una mejor calidad de vida.
Entrenan mucho para luchar por sus sueños, superando los escenarios más adversos. Así se preparan cada semana; Aamir, Gonzalo, Gerald, Fabricio, Javier, Yissel y Sayumi’. Son algunos de los niños y adolescentes que desde hace año y medio forman parte del club ‘Amigos de la Policía’ de la comisaría de Chorrillos. El deporte, disciplina y valores son sus herramientas para decirles a todos: «queremos un futuro mejor, luchamos por eso».
«Solo en el 2021, semanas antes de la pandemia del Covid-19, los menores de edad eran responsables de más del 50% de hurtos en José Olaya y el asentamiento humano Armatambo. Era penoso intervenir una mototaxi y encontrar a bordo a adolescentes en situaciones delictivas. La pandemia permitió que algunos se quedaran en casa. En ese momento ví la oportunidad de retomar los talleres. Era verano y la respuesta fue positiva empezamos con 45 muchachos que llegaban de diferentes sectores», cuenta el suboficial Técnico de Tercera; Luis Eduardo Sifuentes Ramos (50) que se desempeña como coordinador y promotor del club ‘Amigos de la Policía’ de la comisaría de Chorrillos.
Conforme el proyecto fue creciendo, el suboficial Sifuentes Ramos, junto al comisario de Chorrillos, Víctor León, dieron con la pieza que les faltaba; el suboficial PNP Walter Ipanaqué Quevedo (37), que siendo amante del deporte y con destacadas participaciones en el box, calzó perfecto. «Muchos de los chicos llegaban malhumorados. La formación del suboficial Ipanaqué nos permitió acercarnos a estos casos complicados. Así conseguimos identificar los problemas, que muchas veces tenían como origen la casa. Agradecemos la apertura de los padres de cada niño y adolescente para ser asesorados o acompañarlos en cada entrenamiento. El apoyo del suboficial Ipanaqué es fundamental. Muchos de los chicos ahora lo identifican como un hermano mayor, un padre y guia», recalcó el suboficial Sifuentes.
Superar cuadros de bullying, momentos de depresión, sentirse comprometidos con un proyecto y sobretodo saber que sus vidas les interesa a muchas personas, son los logros principales de cada uno de los menores. Ellos reciben clases de box, matemáticas, guitarra, fútbol, básquet, vóley, artes marciales, danza, teatro y ajedrez. Asimismo, han podido conocer, a través de paseos grupales, el Centro Histórico de Lima y claro está más detalles de su distrito; Chorrillos. «Estamos logrando que vean el deporte como un estilo de vida. A los chicos que alcanzan la mayoría de edad también los dejamos acompañarnos por el compromiso que desarrollan con el Club Amigos de la Policía y sobretodo con ellos mismos. Ellos se motivan más cuando vienen a tomarles fotos, conocer un poco más de sus vidas y superación. Muchos de ellos dejaron la actitud negativa, la baja autoestima y ahora se proyectan a destacar en su barrio, distrito, país y por qué no, de manera internacional», exclamó el suboficial Walter Ipanaqué.
Para participar del club ‘Amigos de la Policía; José Olaya – Chorrillos’, uno puede acercarse a la comisaría de Chorrillos preguntar por el proyecto que es gratuito. Y si se requiere de algún pago, este es mínimo y va directo a costear materiales para los menores. Hoy por hoy se desarrolla en la localidad de José Olaya y recibe a niños y adolescentes de este sector, Armatambo, San Genaro, Los Cedros y toda persona que busque una oportunidad para creer, crecer y ser mejor.