Haciendo empresa

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Por: Rubén Miguel Araki Yusa

El coronavirus ha obligado a muchos de nosotros a pensar alguna manera de generar ingresos de manera diferente al que lo estábamos haciendo antes de la pandemia.  En Lima ya se estiman que hay más de 2 millones de desempleados, entre ellas, personas que jamás han hecho empresa, y donde muchos de ellos se verán obligados a dedicarse a su nueva actividad durante un largo período o tal vez de manera permanente.

El asunto es, cómo comenzar, y en este espacio pretendemos trasladar un medio de orientación para minimizar errores, considerando que se estima que el 80% de empresas no sobrevive más de 2 años y nadie quisiera que nuestra nueva fuente de ingresos desaparezca en un mediano plazo.

Es muy importante saber adónde queremos llegar desde el comienzo, y tomar en cuenta que aquella actividad que estamos iniciando, será nuestro camino en los próximos años, por lo que lo primero que debemos considerar es que si no nos gusta lo que hacemos, y no lo hacemos con pasión, difícilmente saldremos adelante, ya que el crecimiento de una nueva empresa implica pasar muchos sinsabores, decepciones, preocupaciones y un sinnúmero de aparentes fracasos que nos lleva el proceso de aprendizaje, y debemos de creer en lo que hacemos para tener la fortaleza mental de seguir adelante a pesar de las dificultades.

La recompensa es muy grande, y es el saber que se han superado todas estas situaciones iniciales, para disfrutar ahora, los logros obtenidos después de haber pasado esa etapa.

Un punto muy importante es enfocarnos en hacer nuestra pequeña empresa pensando como si fuera una gran empresa.  Esto es, de manera organizada, imaginando que inicialmente nosotros somos el Gerente General, Comercial, Financiero, de Operaciones y administrativo, y buscar desde el principio conducirla bajo esta estructura empresarial.

Siempre debemos pensar que cuando iniciamos nuestra pequeña empresa, estamos vendiendo un servicio o producto del que nuestro cliente necesita una retribución adecuada, y en este camino una buena estrategia comercial orientada a la fidelización es importante.  Y la única manera de tener clientes fieles, con un producto o servicio que satisfaga plenamente la necesidad de los clientes, es teniendo clara nuestra estrategia de producto, precio, plaza y promoción.

Otro tema a tratar es el concepto de Innovación que debemos conocer bien si estamos haciendo empresa, estamos generando valor, pues cada acción que hagamos busca siempre un beneficio para ti y para tus clientes.

Erróneamente se considera innovación sólo a nuevas tecnologías. Esto no es así necesariamente. Innovación es toda mejora de proceso o producto bajo cualquier concepción.  El problema que innovar puede ser un proceso complicado, pues inicialmente los cambios no pueden ser aceptados por los clientes, hasta que todos se dan cuenta de los beneficios que produce el cambio.

Finalmente, queremos fomentar la formalización. El 70% de la economía peruana es informal, y para poder crecer de manera efectiva, es importante conocer a fondo los beneficios que significa trabajar formalmente, y que sólo así, saldremos adelante como empresa y como país.

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