La empresaria, que estuvo secuestrada durante once días, ya disfruta de su libertad y pronto podría ver justicia en su caso
Tras el traumático secuestro de Jackeline Salazar, la PNP informó que Jesús Abraham Victorio, primo de la empresaria, admitió su participación en el delito. Las investigaciones descubrieron que las llamadas extorsivas se realizaron desde un celular registrado a la funeraria San Martín, propiedad de Jesús Santos Victorio, tío de Jackeline.
Mientras el tío alega que estaba de viaje durante el secuestro y clama inocencia, su hijo confesó haber proporcionado información clave sobre Jackeline a los secuestradores y haber utilizado el celular de la empresa de su padre.
La situación ha generado controversia entre familiares y amigos de Jesús Santos Victorio, quienes defienden su inocencia y aseguran que él estuvo fuera de la ciudad durante el secuestro.
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La esposa e hija del empresario afirman que él regresó a Lima solo para ayudar en la búsqueda de Jackeline. Sin embargo, el primo Jesús Abraham no ha recibido el mismo apoyo, y su familia ha evitado hacer comentarios al respecto a pedido de su abogado.
Mientras tanto, una semana después de su rescate, Jackeline Salazar rompió su silencio a través de su cuenta oficial de Instagram para agradecer a todos aquellos que la apoyaron durante su cautiverio.
«No tengo palabras para agradecer sus oraciones, apoyo y ayuda. Disculpen si no respondo los mensajes, esto es muy duro para mí y mi familia», escribió Jackeline. La empresaria expresó su gratitud por el milagro de su liberación y destacó la importancia del apoyo y las oraciones que recibió durante los once días de su secuestro, demostrando la fortaleza y el agradecimiento que la han acompañado en su proceso de recuperación.