Gustavo Ilich- Psicólogo
Desenredando la red. En la era digital, donde la tecnología y las redes sociales dominan nuestro día a día, es imperativo abordar un tema que está afectando silenciosamente la salud mental de muchos adolescentes, jóvenes y adultos por igual: los estándares de belleza y la imagen corporal que las redes sociales nos imponen. En éste artículo, exploraremos como las plataformas digitales han moldeado nuestras percepciones de belleza, y como estas nociones toxicas están generando estragos en la salud mental de las personas, precisa Gustavo Ilich Valdez Clavijo, Psicólogo Clínico.
El espejismo de la PerfecciónLas redes sociales han creado un mundo virtual donde la perfección es la norma. Las fotos cuidadosamente editadas y retocadas se presentan como la realidad, creando una brecha entre las apariencias digitales y la realidad humana. Adolescente, jóvenes y adultos, al ser bombardeados con imágenes de cuerpos “ideales”, comienzan a cuestionar su propia valía y autoestima al compararse con estas imágenes inalcanzables.
El ciclo Toxico de comparación y Autoevaluación
Las redes sociales han engendrado un ciclo interminable de comparación y autoevaluación constante. Siempre tienes que estar al día. Si esto no es posible, es muy probable que la gente te deje de lado o te deje fuera de sus conversaciones. En las redes, ya la gente no vale por lo que son, sino por lo que tienen, por lo que muestran o por cómo se ven.
Por lo tanto, cada desplazamiento por el Feed nos lleva a medirnos a nosotros mismos contra los demás, fomentando sentimientos de insuficiencia y ansiedad. Los jóvenes, en particular, son vulnerables a este ciclo toxico, ya que su identidad aún se está formando y pueden ser más susceptibles a la presión social.
Conclusión
Las redes sociales tienen el potencial de ser una herramienta maravillosa para la conexión y la creatividad, pero también pueden infligir daños profundos en nuestra salud mental si no somos conscientes de sus efectos. La búsqueda de poder y reconocimiento a través de las paginas sociales puede generar mucha frustración y gran decepción al no conseguir o alcanzar lo que nos proponemos en dichos medios. Esto conlleva a un sentimiento de insatisfacción muy amplio que puede generarnos serias dificultades en el desarrollo nuestra vida, proporcionándonos una sensación de sinsentido y grandes vacíos que justamente, buscamos llenarlos, ilusoriamente, con todo lo que las mismas redes nos ofrece.
Es hora de reconocerlo para empezar a tomar medidas para proteger nuestra salud mental en el mundo digital.
Gustavo Ilich Valdez Clavijo
PSICÓLOGO CLÍNICO
C.Ps.P.22647
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