‘El Challenger’: el nuevo pedido de mi amado
CHABUCA. – Debo ser honesta, mi esposo trabaja en provincia (Cajamarca), y viene a casa cada dos meses. Y, por esas cosas de la vida y del amor, tengo un amante muy especial. Un hombre formal, no llama la atención, un caballero, respetuoso, tranquilo aparentemente. Pero a la hora de estar en el ring del amor, Dios mío, llego al cielo de placer.
La última noche que estuve con él (hace tres días), me animé a preguntarle cómo sabía tales técnicas.
Me dijo que no me sorprendiera, pero además de leer, también veía esos vídeos triple X. La verdad que antes mi vida era rutinaria, desayuno con el esposo, mercado para su almuerzo si estaba acá; misa los domingos, etc.
Sin embargo, desde que estoy con Wilfredo me siento otra. Su mirada, sus besos volados durante el acto, sus dedos en cámara lenta, sus susurros y pedidos. Lo último que me propuso fue alucinante. ¿Me preguntó “te acuerdas de un transbordador norteamericano que se llamaba El Challenger?”
Si, le respondí “… fue maravilloso. No sé con qué otra cosa vendrá para la próxima, siempre me sorprende y trasciende con sus iniciativas; yo lo sigo y nos complacemos, aprendo. Ya tenemos varias poses establecidas, creo que las voy a enumerar. ¿No sé hasta dónde llegaré? Pero sé que la dicha existe en tal sentido”.
EL CONSEJO
Chabuquita, como estás comprobando, en el sexo acontecen las más increíbles ‘aventuras’, y todo es válido en ese tema; ayuda mucho al organismo, a la belleza, al relax, etc. Tranquila usted. Lo de tu esposo es otro punto a tratar. Permiso.
LPA/
