Oportunidad perdida (Opinión) [VÍDEO]

39
593

Por Renato Medina

Esta vez no hay que reclamar nada. Esta vez Chile nos ganó bien. Me cuesta aceptarlo, en serio. Pero esta vez no se le puede culpar a Neymar, o a Bascuñán, o al VAR. Si hay que buscar un responsable de la penosa actuación ante los vecinos del sur, ese fue el equipo peruano. También hay que aceptarlo.

Hace mucho tiempo que no veo a una selección peruana con tan poca reacción. Hace mucho que no critico un mal planteamiento. Esta vez, Gareca se equivocó, de plano. Otras veces también se ha equivocado, pero supo replantear y corregir su error. Esta vez, me atrevo a decir que, de manera inexplicable, insiste con Ruidíaz cuando el jugador ya demostró que con la camiseta peruana se transforma en Claudio Pizarro, no le hace goles a nadie. Una pena.

¿Por qué no jugó Lapadula? ¿Por qué insiste con Ruidíaz? Gareca dice que el jugador del Benevento necesita tiempo para adaptarse, que no conoce a sus compañeros. Es decir, prefiere que Ruidíaz siga siendo ese delantero intrascendente, que no preocupa a nadie. Más de lo mismo. Con Lapadula, es cierto, no se sabe si va a rendir y se va a compenetrar con sus nuevos compañeros. Pero con Ruidíaz existe le certeza que todo va a seguir igual, que nada va a mejorar. Una pequeña cuota de riesgo quizá no caiga mal.

TAMBIÉN LEE: ¿Ruidíaz o Lapadula? (Opinión)

Chile hizo la simple, poblar el mediocampo, cortar el circuito para evitar que nuestra selección haga lo mejor que sabe hacer, tocar y tener el dominio del juego. Estuvo muy atento, le alcanzó con eso. Algo simple. Pero lo preocupante es la falta de ideas para salir de esa presión.

Ahora, antes del partido, siempre dije que era el momento de ganarle a Chile de visita. Las cosas se presentaban favorables para hacerlo. La ‘Roja’ tenía varias bajas importantes, incluso, uno de sus mejores jugadores (Sánchez), no iba a ser inicialista. Nuestra selección venía mostrando una constante en su juego que lo ha hecho catalogada como una de las mejores del continente. Chile, en cambio, está en un proceso de transición que siempre le cuesta a cualquier equipo. Y lo más importante, el partido se jugaba sin público, sin ese público que es de los más hostiles de la región. Con todo eso, considero que se perdió una gran oportunidad.

Una vez más empezamos las clasificatorias rezagados. Una vez más vamos al siguiente partido con la urgencia de ganar. Y esta vez, el próximo encuentro es ante Argentina. Poca cosa, ¿verdad? Corremos el riesgo de terminar el año con un solo punto, y con las alarmas totalmente encendidas. ¿Podremos recuperarnos esta vez? Este equipo nos ha acostumbrado a hazañas, pero no tendríamos que esperar a estar en cuidados intensivos para recurrir a medidas extremas para quitarnos el respirador.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí