El Sindicato Nacional de Trabajadores Penitenciarios del Perú (SINTRAP-INPE), liderado por su secretario general Ángel B. Llancari Villavicencio, retomará la huelga nacional indefinida desde el 20 de noviembre. Esta medida es una respuesta al incumplimiento de acuerdos por parte del gobierno y el Instituto Nacional Penitenciario (INPE).
Antecedentes
En agosto pasado, el SINTRAP-INPE realizó plantones, marchas masivas y una huelga nacional indefinida que duró 14 días. El Ministerio de Justicia y Derechos Humanos se comprometió a impulsar alternativas de solución para cumplir con las demandas de los trabajadores penitenciarios que laboran en los 68 establecimientos penitenciarios a nivel nacional ¹.
Demandas
El sindicato exige:
– Mejoras salariales y beneficios sociales
– Alimentos para el personal de administración y tratamiento
– Compensaciones adecuadas por horas laboradas en exceso
– Pago de beneficios sociales, incluyendo bonificaciones por 25 y 30 años, CTS, luto y sepelio
Consecuencias de la Huelga
La huelga nacional indefinida tendrá graves consecuencias:
– Cierre de penales a nivel nacional
– Interrupción de visitas de familiares y abogados a internos
– Riesgo de reyertas y motines en establecimientos penitenciarios
– Peligro para la seguridad nacional debido al hacinamiento en carceletas
Es importante destacar que el SINTRAP-INPE había llegado a un acuerdo con el gobierno para levantar la huelga por 45 días, pero el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos no cumplió con sus compromisos. El sindicato busca llamar la atención sobre la situación crítica en los establecimientos penitenciarios del país.
