Jorge Barata rompe colaboración en caso Lava Jato tras orden de prisión preventiva

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LA DEFENSA DEL EXDIRECTIVO de Odebrecht anuncia acciones ante instancias internacionales para evitar su detención en Perú.

El exdirectivo de Odebrecht en Perú, Jorge Barata, ha decidido dar por concluida su colaboración eficaz con la justicia peruana, tras recibir una orden de prisión preventiva de
36 meses por el caso Gasoducto Sur. Su abogado, Carlos Kauffmann, anunció la medida y criticó la decisión, calificándola como una “violación” del acuerdo de cooperación
judicial entre Perú y Brasil. Este anuncio marca un cambio significativo en el caso Lava Jato, donde Barata era una pieza clave para las investigaciones de corrupción en el país.
Según el abogado, la detención preventiva de Barata representa una ruptura en los compromisos asumidos en el tratado
El presidente de Bolivia, Luis Arce, denunció la ocupación de tres cuarteles militares en el Trópico de Cochabamba por grupos armados vinculados al exmandatario Evo Morales, quienes retienen a 20 militares. Las Fuerzas Armadas condenaron la acción, cabilateral de cooperación.
Por ello, Kauffmann aseguró que presentará una apelación y, además, emprenderá acciones ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos e Interpol para evitar la captura de su patrocinado. La defensa de Barata considera que estas medidas son fundamentales para
proteger sus derechos en el marco de la cooperación internacional.
Kauffmann también advirtió que solicitará a la Corte Suprema de Brasil la
suspensión de la colaboración judicial en el caso Lava Jato, argumentando que la decisión peruana ha vulnerado las condiciones del acuerdo. De proceder esta acción, el proceso podría enfrentar complicaciones, pues Barata era testigo en varias investigaciones que involucraban a Odebrecht y otras figuras políticas en Perú.
Barata fue incluido en la investigación del Gasoducto Sur Peruano el pasado 10 de julio, acusado de colusión agravada. La prisión preventiva de 36 meses dictada por el Poder Judicial peruano busca asegurar su comparecencia en este caso, donde se le considera cómplice en los beneficios otorgados a Odebrecht. La medida será efectiva si el empresario se entrega voluntariamente o mediante extradición, con un plazo de diez días hábiles antes de activar su captura a nivel internacional.

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