Corto circuito en las luces de la pista de aterrizaje provoca cancelaciones masivas. La Fiscalía del Callao advierte indicios de omisión de funciones.
El Aeropuerto Internacional Jorge Chávez vivió un caos este lunes tras un corto circuito en las luces de la pista de aterrizaje que llevó a la cancelación y desvío de 215 vuelos, afectando a más de 10 mil personas.
El ministro de Transportes, Raúl Pérez Reyes, y el presidente de Corpac S.A. asistieron a la Comisión de Transportes del Congreso, donde afirmaron que el incidente no fue resultado de una manipulación dolosa, sino de un evento fortuito.
Pérez Reyes explicó que el problema fue causado por un corto circuito en el sistema de cableado eléctrico, y que Corpac contaba con el equipamiento necesario para reparar el daño. Sin embargo, no se había implementado un plan de contingencia para manejar situaciones de este tipo, lo que exacerbó la crisis.
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A pesar de los esfuerzos por normalizar las operaciones, aún se presentan inconvenientes, especialmente en el área de internaciones, donde muchos pasajeros han tenido que reprogramar sus vuelos varias veces y pasar la noche en el terminal aéreo.
Ante esta situación, el Ministerio Público emitió un comunicado alertando sobre posibles indicios de omisión de funciones por parte de Corpac S.A., lo que ha desencadenado una investigación por parte de las Fiscalías Corporativas Penales del Callao.
La pesquisa se centra en determinar si hubo negligencia en la gestión del sistema eléctrico y en la respuesta a la emergencia, lo que podría agravar la situación legal para los responsables de la operatividad del aeropuerto más importante del país.
