Por Renato Medina
Ricardo Gareca entrega este viernes la lista preliminar de los convocados para disputar el repechaje el próximo 13 de junio. Paolo Guerrero vino es Estados Unidos gritando a los cuatro vientos que está listo, que ya no está lesionado, y que en la Videna se va a poner a punto para jugar. Pero, ¿Gareca lo llamará? Podría, pero, ¿lo hará?
Para muchos le está poniendo presión al ‘tigre’ para que sea tomado en cuenta, al menos en la lista preliminar. Siendo sinceros, por lo menos en mi modesto punto de vista, Guerrero ni siquiera debería pensar en eso. Hay otros que se han ganado ese derecho en la cancha. Si el capitán de la selección quiere volver a ponerse la blanquirroja, también tiene que ganarse ese derecho en la cancha.
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Paolo no juega un partido oficial desde el 7 de octubre del 2021 (cuando se le ganó a Chile 2-0 en el Estadio Nacional, por las clasificatorias), no tiene club, y al parecer va a seguir sin club por un tiempo más, pues no se vislumbra nada cercano. ¿Alianza Lima? ¿México? Todo eso son solo especulaciones, nada concreto.
Si el capitán dice amar tanto a Perú, ni siquiera debería deslizar la posibilidad de ser opción de jugar (por ahora) en la selección. ¿A quién se sacaría? ¿a Valera, a Ormeño, a Lapadula? Nada que ver. Debe, primero, pensar en jugar, en buscar club, tener ritmo; si lo consigue, solo en ese momento, puede pensar en jugar (si Dios lo quiere) su segundo mundial.
