RICARDO ALARCÓN, SÍMBOLO DE LA REVOLUCIÓN
Ricardo Alarcón de Quesada falleció la noche del último sábado, confirmaron en las últimas horas del domingo los dirigentes del gobierno en la isla. Alarcón fue uno de los políticos y diplomáticos más influyentes en el país desde el establecimiento del gobierno revolucionario.
El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, manifestó su pesar y condolencias por el fallecimiento del exdiplomático. En palabras del mandatario, Alarcón Quesada fue un defensor del proceso revolucionario en la isla ‘’con pasión y sólidos argumentos’’.
‘’Anoche ha muerto en La Habana, Ricardo Alarcón de Quesada, gran patriota y brillante diplomático de la Revolución Cubana’’, escribió en su cuenta personal de Twitter Díaz-Canel.
En vida, Alarcón de Quesada ocupó cargos importantes dentro del gobierno cubano como: ministro de Relaciones Exteriores y presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular. También jugó un rol fundamental en el restablecimiento de las relaciones bilaterales entre Estados Unidos y Cuba, al haber ejercido de mediador durante las negociaciones.