El éxito del gabinete de ancha base estará en el equilibrio y la aplicación de un política política-económica centrista. El analista político, Luis Benavente, consideró también fundamental, que se reactive el sistema productivo del país, que se recupere el empleo, que haya un mayor bienestar en las familias de los peruanos que están muy golpeadas por el efecto económico de la pandemia. El director ejecutivo de Vox Populi Consultoría, advirtió igualmente que, tal como van las cosas, va muy difícil que el presidente, Pedro Castillo, culmine su quinquenio de gobierno. Dijo que para ello, tendría que hacer cambios radicales, buscar un mayor equilibrio político, impulsar el sistema productivo.
¿Qué ocurrirá con el país ante la posibilidad de un gabinete de ancha base que reconduzca el país, adelantada por el cardenal Barreto y el secretario técnico del Acuerdo Nacional, Max Hernández?
Vamos a ver, primero, si es que se da ésto. Segundo, qué entiende Castillo por “ancha base”. Hay distintas maneras de entender (el término) ancha base. Yo entiendo que significa hacer política de una manera mas amplia de representación, en el gabinete. Si el gabinete ha tenido una tendencia de izquierda caviar e izquierda extrema, entonces su ancha base tendría que incorporar figuras de centro, no sólo con propuestas políticas e ideológicas, sino también económicas.
Habría que llevarlos a un mayor impulso, por ejemplo, de la economía de mercado, y dar mayor recuperación al empleo. De alguna manera, esto se ha dado, en el Perú, en los años 90’, en que las carteras sociales (Educación, Mujer, Trabajo y Promoción Social e, incluso Interior) han estado en manos de izquierdistas; y las carteras productivas (Economía, Producción, Comercio), en manos de derechistas. En cualquier caso, lo que sí es fundamental es que se reactive el sistema productivo del país, que se recupere el empleo, que haya un mayor bienestar en las familias de los peruanos que están muy golpeadas por el efecto económico de la pandemia, y por el efecto recesivo del actual régimen, que no ha impulsado las inversiones, ni el empleo.
En todo caso, ¿qué podría suceder si el presidente Pedro Castillo no atendiese este recambio y nuevo aire planteado? Tiene que poner gente calificada (en el gabinete), sino va a tener inmediatamente una reacción de la oposición. Tiene que pasar por un escáner a todos sus próximos ministros. Creo que el presidente tendría allí una oportunidad para relanzar su gobierno.
Los conflictos sociales se han disparado y las demandas insatisfechas, ¿podrían crear un desborde social?
Claro que se han desbordado y están creciendo. Si la ministra de Trabajo (Betssy Chávez) autoriza una huelga de controladores aéreos, en plena temporada de punta, cuando viene Semana Santa y aumenta el transito de pasajeros, entonces, ¿quién esta moviendo los conflictos so- ciales, sino la ministra, no? Si la expresidenta del Consejo de Ministros (Mirtha Vásquez) estaba en una acción a favor de los bloqueos de carreteras, para afectar la actividad minera, entonces los conflictos sociales terminan siendo azuzados por el gobierno. Por lo tanto, claro que van a crecer y va a haber mayor conflictividad social. El gobierno, en vez de sentar a todos en una mesa con una manguera de apagar incendios, lo que hace echar gasolina al fuego.
¿Hasta que punto podrían manejarse los factores externos e internos que han desbordado la grave crisis económica que nos abate? Sí, es una buena pregunta. Es cierto que hay factores externos. La subida de los precios tiene mucho que ver con el alza de los combustibles, en el mercado internacional. Y la subida del precio del gas, que repercute en los precios de todos los productos. Pero también tenía que ver con una huelga de transportistas, que tuvieron exigencias que el gobierno no pudo manejar. Entonces hubo también factores internos. Considero que poniendo gente mas calificada en los cargos altos del gobierno, iniciando una política muy decidida para reactivar el sistema productivo, así como también medidas para apoyar a los informales y a los pobres, creo que se podría recuperar la confianza. Creo que el presidente tiene un margen de maniobra.
Aunque la relación de él con Perú Libre, tiene mucho que ver con ésto, porque Perú Libre incide en la gobernabilidad. Si es que el presidente pusiera un gabinete, prescindiendo de la participación de Perú Libre, se corre el riesgo de que esa treintena de congresistas puedan, en un momento dado, formar parte del proyecto de vacancia presidencial. Es una situación compleja, efectivamente.
¿Cree usted que Vladimir Cerrón es el principal factor de distorsión que mantiene secuestrado, en su voluntad, al jefe de Estado, atribuyéndole la mayor cantidad de desaciertos en la gestión gubernamental?
No creo que lo sea. Digamos que es influyente, tiene mucha fuerza, preside el partido de gobierno, no cabe duda. Pero no tanto (como) para tener secuestrado al presidente. El ministro de Economía no es de la línea ideológica de Vladimir Cerrón, no? Yo creo que hay un peso (político) fuerte de Perú Libre y Vladimir Cerrón en las decisiones de gobierno, pero falta la habilidad de poner un equilibrio, y que es la capacidad que no ha tenido el gobierno.
¿Considera usted que el presidente Castillo logrará culminar su mandato de cinco años de gobierno? Como van las cosas, va muy difícil. Él tendría que hacer cambios radicales, buscar un mayor equilibrio político, impulsar el sistema productivo. Buscar un mayor equilibrio, no sólo con los partidos políticos, sino también con los movimientos sociales. Contrarrestar los conflictos sociales, actuar mas políticamente, manejarse con operadores mas eficientes. Tal como van las cosas hasta ahora, no creo que termine su gobierno. Pero tiene siempre la opción de hacer cambios. Siempre hay un margen para todo. Y, bueno, tal vez rodearse con un equipo de asesores políticos que le ayuden a conducir políticamente el país (valga la redundancia).
Y esa falta de una buena asesoría política se habría notado, entonces, en el fiasco de la inmovilización obligatoria de 22 horas del pasado 5 de abril, en Lima Metropolitana y el Callao.
El ejemplo mas cercano, es muy ilustrativo. Decretar hace dos semanas y de un minuto para otro, prácticamente, un toque de queda, mira lo que generó. Entonces, quiere decir que no evaluaron los riesgos y ex post, podemos pensar que era muy predecible lo que iba a pasar desautorizándose él mismo, revocando su medida a media tarde. Es una falla clara, por no saber tomar decisiones políticas. La política tiene sus reglas, tiene sus códigos, sus riesgos, por cierto
