(ENTREVISTA) Un historiador en la universidad de la calle

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El transporte urbano se vuelve más placentero con las exposiciones de Gabriel Rivadeneyra Escalante

Por: LUIS A. PARDO ALTAMIRANO

Es un privilegio escucharlo, con una oratoria que encandila desde el momento que sube a las unidades de transporte con su mochila verbal llena de historias que clarifican los conceptos sobre esos lugares que a diario transitamos.

Un ‘loco’ de acción quijotesca que va por esos buses y caminos enseñando a los pasajeros que habitan esta ciudad de reyes sin tales. Siete horas al día difundiendo los nombres e historias de esos espacios que el tiempo va guardando mientras unos vamos olvidando y otros atesorando.

Es una labor quijotesca la suya que ahora ya llegó al ámbito digital, a través de su ‘Colectivo Javier Prado’

Bueno, yo diría “sanchopancesca», pero no por falta de ideales como era habitual característica en el personaje de la obra clásica “El Ingenioso Hidalgo Don quijote de la Mancha”, sino por su figura obesa, porque tantas cuarentenas a causa de esta bendita pandemia me han engordado tanto como Sancho Panza, el fiel escudero de don Quijote. Pero, volviendo a su pregunta, sí, creo que esta labor que realizo en los buses para muchas personas es una manera de incentivar el patriotismo que nos hace falta, actividad que se ha complementado muy bien, y lo recalco muy bien con el ámbito digital.

Es cátedra mientras se viaja

Sí, pues. Aprovecho que a causa del virus no se permite en los buses que los pasajeros vayan de pie ni que se ingiera alimentos dentro de él, para simular el interior del bus como si fuese un verdadero salón de clases, mostrando imágenes en blanco y negro y a colores, haciendo participar a los pasajeros, permitiendo que hagan preguntas, etc., mire que hasta me dan ganas de llevar una pizarra (risas).

Usted cuenta la historia de avenidas, plazas y monumentos en las unidades de transporte público

Efectivamente, vea, en mi casa hay un lugar estratégico: nuestra biblioteca, en ella se ha sumado libros tanto de mi esposa, maestra de carrera, y los míos, que si el cálculo no me falla ya debemos contar con 2,500 textos. No hay día que no permanezca en mi biblioteca, allí investigo, hago fichas, memorizo, llamo por teléfono a amigos que conocen más que yo de algunos temas para contrastar información, escribo y luego comparto. Ejemplo: tengo amigos de mi promoción escolar y compañeros de la universidad que ejercen diferentes profesiones, uno de ellos es José Suazo, un calificado arquitecto de carrera, a quien constantemente le consulto sobre el tipo de suelo de Lima, el diseño de la arquitectura monumental del centro de la capital, entre otra información. 

¿Sus motivaciones don Gabriel?

Mis dos hijitas Gabriela y Alessandra, mi hijo Alonso y el amor de mi existencia, Ofelia, mi compañera ideal eterna y maestra de Lengua y Literatura, que ha sabido canalizar mis locuras como ésta que es objeto de la entrevista.

Su labor como difusor cultural abarca a todos los distritos de Lima y

tiene un gran respaldo al haber transitado también por la universidad.

Si bien es cierto estudiar en la universidad me hizo conocer muchísimas cosas sobre mi país y mi ciudad, Lima; yo le puedo asegurar, estimado amigo, que la Universidad de la Vida y mi autodidactismo me enseñaron mucho más. Ahora, respecto del recorrido que hago por la ciudad capital explicando la historia de sus calles y avenidas, sí, pues, cada una de ellas tiene exquisitas historias que sería un pecado mortal no contarlas. Lima y sus avenidas, Barranco y sus calles o Chorrillos con sus baños; hay mucha riqueza en cada uno de estos lugares; y lo que hago es rebuscar y compartir lo que el tiempo guarda de ellos.

Y así mientras circulamos en los buses, podemos aprender la historia de la avenida Alfonso Ugarte o del mismo Colegio Guadalupe

Claro, la avenida emblemática del centro de Lima, Alfonso Ugarte y Bernal, fue la carretera del gas en la década de 1850.

Con el tiempo usted formó el Colectivo Javier Prado en el año 2016, hoy en la red Facebook tiene más de 30 mil seguidores

Gracias a Dios, caballero, así es; y ello refleja, de alguna manera, el nacionalismo escondido, la identidad reservada de un pueblo que trabaja y va para adelante.

En efecto. Usted mismo se ayuda gracias al aporte de sus alumnos callejeros

Prefería llamarlos alumnos pasajeros (risas), con el doble sentido que esta palabra tiene, por un lado, pasajeros, porque son clientes de un servicio de transporte, y, por otro lado, pasajeros, porque a la mayoría de ellos ya no los vuelvo a ver (siguen las risas). Sí, gracias a todos por acompañarme en este proyecto que continua en los buses y redes sociales y, en especial, a las empresas de transporte ETUSA 52T, 52C, Nueva América, Cristo de Pachacamilla 10E, Las Flores Línea 18 y el Grupo Diez SAC, porque sin ellas las clases de Historia no serían posibles. Y sí, los alumnos pasajeros nos pueden apoyar con un aporte económico según su buena voluntad. Aquí el número de agente BCP 191-98295953-0-39 o mi número para yapear al 992 477 280; asimismo la cuenta BBVA 0011-0482-0200319666 a nombre de Gabriel Rivadeneyra.

Aportes sobre ruedas

La Fuente China de Agua

Este regalo de la colonia china se encuentra dentro del Parque de la Exposición y fue inaugurado el 27 de julio de 1924.

La Torre Reloj

Se ubica frente a la casona de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, en el Parque Universitario. Se inauguró el 10 de julio de 1923 y fue una donación de los residentes alemanes.

El monumento a Manco Cápac

Fue un obsequio de la colonia japonesa. Se inauguró el 4 de abril de 1926 y se encuentra en el distrito de La Victoria

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