Me dicen ‘Huesitos’ pero tengo mi jale
TERESA. – Apreciada licenciada, ayer leía a una de sus seguidoras que se jactaban de sus curvitas y rellenitos.
Yo, sin embargo, represento a quienes no vamos al gym o no dejamos de comer por las dietas que el estómago y cerebro demandan. Y así flacuchenta como me ven, salgo airosa y triunfadora con mi media naranja.
Si, acepto todo lo que me dicen doctora, pero no me hago bolas al escuchar la mofa y joda de quienes comprueban mi felicidad. Y les reitero, no me amilana que me llamen, ‘Popotitos’, ‘Oliva’, ‘Loncherita de perro’, etc.
Porque, mi Juan (el novio que tengo) dice que él se siente más operativo con una sencillita como yo, “tengo más capacidad de acción contigo” me dice mi amado. Y sí pues, me doy cuenta que para muchas ‘rollizas’ nosotras las huesuditas somos como una especie de amenaza, cuando no hay por qué, ya que cada quién tiene su arte, y por supotito que yo el mío.
Además, qué culpa tendrá una flaca como yo de que esas no pueden controlar su propio cuerpo como el que realmente desean tener. Evidentemente, esas gordiñas tienen alta insatisfacción corporal, por tanto, sienten malestar y vergüenza cuando visualizan fotografías de su propio cuerpo, en especial cuando en estas fotografías aparecen imitando posturas y poses de ‘modelos profesionales’.
EL CONSEJO
Teresita, te leo y compruebo que amen de las apariencias lo interno también cuenta. A lo mucho, échale una papita más al caldo y palante.
