Por Renato Medina
Lionel Messi está más fuera que dentro. Todos se rasgan las vestiduras. Culpan a Bartomeu de la salida del astro argentino y apelan al ‘bobo’ de la ‘pulga’ para que se quede en Barcelona. Pero parece que esta vez sí va en serio.
¿Por qué quiere irse Messi del Barcelona? Dicen por ahí que, simplemente, es por la crisis interna y administrativa. Yo me animo a creer que es porque no se siente capaz de ser el líder que el club necesita. El líder que necesitan los que vienen atrás. De esos jóvenes que lo ven como un modelo a seguir. Le pesa eso. No puede con tanta presión.
A sus 33 años, el argentino ha ganado todo con los azulgranas. Ha sido parte de, quizá, la mejor expresión futbolística de la historia. Discutible para algunos, para mí, no. Pero esa expresión futbolística no solo era Messi, era todo un equipo, a la que se sumó el mejor momento del pequeño delantero con hambre de gloria.
TAMBIÉN LEE: La comidilla del Barcelona (Opinión)
Ir a la Premier League o al Calcio Italiano son las opciones. Al Manchester City o Inter de Milán. ¿Qué liga le cae mejor? De confirmarse su salida de España, una liga que le ‘cayó a pelo’, por el estilo de juego, el destino que se ‘acomoda’ mejor al juego de Lionel, creo yo, es la italiana.
En Italia, hace rato que el fútbol cambió. Ya no es ese de presión constante, de los famosos ‘candados’, de los que priorizan el cero en su arco, antes que buscar el contrario. Ahora se juega más, hay más libertad, más pausa, menos vértigo que en la Premier. Messi, de ir a la liga inglesa, lo va a sufrir.
Pero en el City está Guardiola, aquel que sacó lo mejor del argentino. Quizá eso lo haga inclinarse por ir a la Premier. De ser así, como dije, lo va a sufrir. Messi se siente más a gusto ser el mejor de un gran equipo, que ser la estrella y líder de un ‘equipo más’. Con él no va eso.
Veremos si se concreta su salida del Barcelona. Algo que para muchos era impensado. Lo que sí es cierto, es que los problemas de Messi no se solucionan yendo a otra liga. Se solucionan quitándole responsabilidades que no está capacitado para afrontar.